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En teoría política, el Estado es una herramienta de opresión de una clase social sobre otra.[1][2] Es un producto de la lucha de clases, creado de forma natural a medida que surgen las clases en la historia de la humanidad, para garantizar que el poder de la clase dominante pueda protegerse.
Por lo tanto, el Estado es una creación de las condiciones materiales, de lo que se deduce que no siempre ha existido y no siempre existirá a medida que se transformen las condiciones materiales.
Definición
El Estado es un producto de una sociedad en una determinada fase de desarrollo, cuando los medios de producción están lo suficientemente avanzados como para que surjan las clases. Durante la mayor parte de la historia de la humanidad, las sociedades carecían de Estado, ya que las condiciones materiales no permitían que surgieran clases sociales y que unas subyugaran a otras; principalmente porque había muy poca plusvalía que apropiarse de los trabajadores.
Como el Estado trata de afirmar la supremacía de una clase sobre otra, funciona para resolver intereses de clase fundamentalmente opuestos. Por ejemplo, a la burguesía le interesa explotar la mayor cantidad posible de plusvalía del proletariado (aumentando sus beneficios), y al proletariado le interesa ceder la menor cantidad posible de plusvalía (aumentando sus salarios). El Estado funciona como una herramienta de conciliación de la contradicción, aunque nunca puede resolverla (ya que requeriría la abolición de la sociedad de clases por completo).
El Estado abarca más que la vida sociológica y vive en todos los aspectos de sus ciudadanos. La policía, el ejército, el sistema político, el modo de producción, las leyes que se adoptan y las instituciones que se derivan de esas leyes... todo forma parte del Estado y sirve para hacer valer la voluntad de la clase dominante. La escolarización, por ejemplo, que en general se ha hecho obligatoria en cierta medida durante la revolución industrial, responde a una necesidad del modo de producción: transmitir información a través de texto es mucho más eficaz a la hora de dirigir una fábrica que a través de la voz. Por tanto, se espera que todos los trabajadores sepan leer (las instrucciones de sus máquinas, las nuevas directrices de los directores, etc.). Sin embargo, si la escolarización es importante para perpetuar el modo de producción (que beneficia a la clase dominante), es el gobierno el que paga los costes. Por tanto, el Estado perpetúa las necesidades y los ideales de la clase dominante.
Sociedades sin Estado
Hoy en día todavía existen sociedades sin Estado, en forma de tribus en algunas partes del mundo. En estas sociedades, no existe el concepto de propiedad privada o propiedad personal en la medida en que lo vemos en las sociedades capitalistas. Los medios de producción se comparten entre todos los miembros, y la plusvalía de la producción resultante se reparte mayoritariamente a partes iguales entre todos. Los Namal de Vanuatu, por ejemplo, fabrican sus armas de caza en beneficio del colectivo, que los hombres y los niños utilizarán en grupo para sus cacerías diarias en el bosque circundante. Las capturas resultantes de la caza se cocinan en la aldea y se reparten equitativamente según las necesidades de cada uno. Esta forma de organización sin Estado, sin clases y sin dinero se conoce como comunismo primitivo.
Dictadura de la burguesía
En la teoría marxista, la cuestión no es entonces qué hacer con el Estado, sino qué colectivo controla el Estado. Uno de estos posibles colectivos es la burguesía. A medida que el capitalismo se desarrolla a partir del feudalismo, tendrá lugar una revolución burguesa; la sustitución militante de la nobleza feudal en favor de los capitalistas como clase dominante de la sociedad. Tras esta revolución, se formará una Dictadura de la burguesía. Una dictadura burguesa a menudo desarrollará ideas de "derechos naturales", "consentimiento popular" y otras nociones idealistas para mantener su poder y hacer que su plutocracia (el gobierno de los ricos) parezca una democracia (el gobierno de la mayoría). Sin embargo, a medida que el capitalismo comienza a desarrollarse, con el tiempo, la economía será gobernada por cada vez menos manos y se creará un sistema más explotador para los trabajadores.
Por lo general, cuando una dictadura burguesa se acerca a su fin debido al creciente poder de los movimientos obreros, la clase dominante recurrirá a medidas extremas para mantener su riqueza y su poder, es decir, al fascismo, que incluye la consolidación total del capital en manos de unos pocos y la aniquilación por la fuerza de cualquier resistencia del proletariado.
Dictadura del proletariado
Cuando el capitalismo alcance su límite, se producirá una revolución proletaria. Esto conduce a la dictadura del proletariado, en la que el proletariado como clase (y no necesariamente como individuos) controla el Estado para oprimir a la burguesía, del mismo modo que la burguesía ha oprimido al proletariado durante siglos.
Desaparición del Estado
El Estado se marchitará de forma natural a medida que se resuelvan las contradicciones. Si no hay necesidad de que funcione una determinada rama del Estado, es decir, si no hay base en las condiciones materiales, entonces no existirá. Esto se ejemplifica naturalmente en la sociedad capitalista, por ejemplo al disolverse los ministerios de las colonias después del período colonial, por nombrar sólo uno. Si se resuelven todas las contradicciones de la sociedad, entonces se deduce que el propio Estado se disolverá con el tiempo, dando lugar finalmente a una sociedad sin Estado libre de opresión y explotación.
Referencias
- ↑ “And people think they have taken quite an extraordinary bold step forward when they have rid themselves of belief in hereditary monarchy and swear by the democratic republic. In reality, however, the state is nothing but a machine for the oppression of one class by another, and indeed in the democratic republic no less than in the monarchy; and at best an evil inherited by the proletariat after its victorious struggle for class supremacy, whose worst sides the proletariat, just like the Commune, cannot avoid having to lop off at the earliest possible moment, until such time as a new generation, reared in new and free social conditions, will be able to throw the entire lumber of the state on the scrap-heap.”
Friedrich Engels (1891). Introduction to Karl Marx's "Civil war in France". - ↑ “Aquí aparece expresada con toda claridad la idea fundamental del marxismo en punto a la cuestión del papel histórico y de la significación del Estado. EI Estado es el producto y la manifestación del carácter irreconciliable de las contradicciones de clase. El Estado surge en el sitio, en el momento y en el grado en que las contradicciones de clase no pueden, objetivamente, conciliarse. Y viceversa: la existencia del Estado demuestra que las contradicciones de clase son irreconciliables.”
Vladimir Lenin (1917). 'La sociedad de clase y el estado: El Estado, producto del carácter irreconciliable de las contradicciones de clase' en El Estado y la revolución.