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¡Qué sean los pilares sobre los que descanse la futura Corea, poderosa y próspera! (Kim Jong Un)

De ProleWiki, la enciclopedia proletaria

Discurso pronunciado en la reunión conjunta nacional conmemorativa del aniversario 66 de la fundación de la Organización de Niños de Corea. 6 de junio del año 101 de la era Juche (2012)

¡Qué sean los pilares sobre los que descanse la futura Corea, poderosa y próspera!
AutorKim Jong Un
Escrito en6 de junio de 2012
Fuentehttps://archive.org/details/la-republica-popular-democratica-de-corea-y-la-ospaaal/page/318/mode/2up?view=theater

Queridos miembros de la Organización de Niños de todo el país; Delegados a la Reunión Conjunta Nacional conmemorativa del aniversario 66 de la fundación de la Organización de Niños de Corea (ONC]):

Hoy estoy muy alegre y complacido por encontrarme con los dignos delegados y miembros ejemplares de todos los rincones del país que han realizado de un solo impulso un largo viaje desde la Escuela Secundaria Jongilbong, situada al pie del monte Paektu, hasta el centro homólogo de la isla Cho, en la primera línea del frente.

Contemplar los agradables aspectos y semblantes amables de los miembros de la ONC aquí presentes me da la sensación de encontrarme con todos los amigos, maestros, padres y hermanos que les desearon un buen viaje a Pyongyang.

Les felicito calurosamente a todos ustedes y demás miembros de la ONC que celebran el aniversario 66 de su organización, precisamente en el momento prometedor en que se aproxima la mañana del Estado socialista, poderoso y próspero, en medio del gran interés y bendición de nuestro Partido y pueblo.

A la vez, envió un saludo cordial a los maestros y padres de todo el país que se esfuerzan por formar de modo excelente a los alumnos.

El 6 de junio es el Día de la ONC y, al mismo tiempo, una preciosa fiesta de nuestro Partido y de todo el pueblo.

El mundo no conoce a escolares como los millones de niños coreanos que, unidos compactamente en una agrupación con el pañuelo rojo en el cuello, crecen como dignos protagonistas del porvenir.

Los miembros de nuestra Organización de Niños aman infinitamente al benevolente Partido y la Patria que los acogen en su regazo, estudian bien, crecen lozanos y dignifican al país con su sobresaliente talento.

Para nuestro Partido y el Gobierno de la República, los queridos miembros de la ONC son tesoros incomparables con toda la riqueza del mundo; son la totalidad de su esperanza y porvenir.

Herederos de las tradiciones revolucionarias del Cuerpo Infantil del período de la guerra antijaponesa, nuestros fidedignos miembros de la ONC lucharon con valentía e hicieron muchos trabajos útiles para la patria y el pueblo, enarbolando con orgullo la bandera de su agrupación.

Fue en nuestro país donde por primera vez se crearon las guardias y guerrillas infantiles y los niños protagonizaron actos heroicos como arriesgar la vida para salvaguardar del fuego los retratos de sus líderes y los bosques.

Los miembros de nuestra Organización de Niños son pequeños patriotas y constructores loables que hicieron posible la fabricación de los tanques bautizados como Niño, aviones Niño y buques Niño para el Ejército Popular y contribuyeron a la construcción socialista y la vida económica nacional.

Aun en los días de prueba, cuando la Patria llevaba a cabo la “Marcha Penosa”, estudiaron con afán, vencieron las dificultades y derramaron gotas de sudor con amor al país, desplegando actividades socio-políticas como el Movimiento Nuestra Escuela-Nuestro Puesto de Defensa.

Aquellos miembros de ayer, convertidos en Héroes e innovadores trabajadores que gozan del amor y el respeto de todo el país, y funcionarios que asumen altas responsabilidades, honran con su presencia aquí a la nueva generación de la agrupación infantil.

Nuestro Partido y pueblo consideran como su gran alegría y orgullo el tener a tan excelente y magno contingente de millones de niños revolucionarios, que promete un luminoso porvenir para la Corea de Songun.

El hecho de que la ONC haya podido ostentar su presencia ante el mundo como una poderosa agrupación de continuadores de la revolución ha sido posible gracias al benévolo regazo de los grandes Generalísimos Kim Il Sung y Kim Jong Il, quienes tenían como dones innatos el inigualable y sublime amor a las generaciones venideras, amor al futuro.

En cada tramo de la trayectoria de la ONC están impregnadas las huellas de la cálida atención de los Generalísimos, que la condujeron paso a paso, presentándole nuevas consignas acordes con el avance de la revolución y prepararon a sus integrantes como verdaderos hijos, infinitamente fieles al Partido y la patria socialista.

Ellos fueron invencibles comandantes de acero que hacían temblar de miedo a los enemigos, pero cariñosos y atentos padres para los escolares que los amaron ilimitadamente.

Por primera vez en el mundo definieron como eterna política de la República enseñar y vestir gratis a todos los niños del país, hicieron levantar magníficos palacios y campamentos para ellos en los mejores sitios y, aún no satisfechos con esto, se preocuparon constantemente por brindarles más y mejores cosas.

La humanidad no conoce padres tan grandiosos que hayan consagrado toda su vida al bienestar de los estudiantes, a los que definieron como reyes del país, y consideraron el amor a las generaciones venideras como el más importante asunto del Partido y el Estado.

De veras, la Organización de Niños de Corea es la digna agrupación infantil de Kim Il Sung y Kim Jong Il que ha crecido bajo su cariñoso afecto, y ser un integrante de este contingente es un motivo de inmenso orgullo y honor.

Queridos miembros de la ONC:

Ustedes son los continuadores de la revolución de Songun y protagonistas de su porvenir.

El futuro de Corea les pertenece y en vuestra imagen se refleja el mañana de la patria.

Nuestro Partido se propone entregarles un Estado socialista poderoso y próspero, el mejor del mundo.

La poderosa y próspera Corea del mañana, de la que ustedes serán dueños, será el país más potente del mundo, donde todas las familias se colmarán de felicidad y todos vivirán en armonía.

Precisamente ustedes, los miembros de la ONC, construirán y sostendrán mejor a este gran país.

Guardando siempre en lo profundo del corazón la ilimitada confianza y benevolencia de los Generalísimos Kim Il Sung y Kim Jong Il, deben vivir como el girasol; aprender de modo activo de su gloriosa infancia y juventud y heredar con firmeza el linaje de la revolución, enarbolando su estandarte, antecedido por las eternas banderas con sus imágenes sonrientes como el Sol. Si el Ejército Popular y la Unión de la Juventud son la avanzada de la revolución de Songun que encabeza la causa de nuestro Partido, la Organización de Niños es su reserva.

Igual que Kim Ki Song y Kim Kum Sun, héroes del Cuerpo Infantil antijaponés, y los guerrilleros infantiles del período de la Guerra de Liberación de la Patria, han de ser verdaderos revolucionarios y guardias del tiempo de Songun que defienden a riesgo de su vida nuestro Partido, y avanzar directamente por el camino indicado por este.

Una tarea importante que se presenta ante los miembros de la ONC es prepararse firmemente como competentes cuadros y pilares de la Corea poderosa y próspera, dotados de ricos conocimientos, nobles virtudes y fortaleza física.

La futura Corea poderosa y próspera se configurará primero por las calificaciones de los miembros de la ONC.

En el porvenir, cuando nuestro país haya alcanzado las más avanzadas tecnologías, para no hablar del presente, cuando vuelan cohetes espaciales y se extienden mares de máquinas CNC, un alumno con notas bajas no podrá hacer nada ni seguir la marcha de la Patria.

Con la consigna ¡Aprendamos con la Corea poderosa y próspera! en alto, los estudiantes no deben pasar en vano ni un rato, sino estudiar y estudiar con gran entusiasmo.

Precisamente de entre los miembros de nuestra Organización de Niños deberán salir inventores y científicos de talla mundial que asombren a la humanidad.

Además, deben ser miembros ejemplares de la ONC que observen bien la ética moral socialista, amen siempre su organización, colectivo y amigos, respeten a los maestros y mayores, sobresalgan en los ejercicios deportivos y realicen voluntariamente muchas obras beneficiosas para la Patria.

La vida orgánica en la Organización de Niños es la primera fase de la vida política del hombre.

El pañuelo rojo de la Organización es la herencia del Cuerpo Infantil antijaponés y forma parte de la bandera roja del Partido del Trabajo de Corea. Teniendo bien presente que el honor de ser militantes del Partido y conseguir la medalla Estrella de Oro del Héroe comienzan con el pañuelo rojo y la insignia de la ONC, los niños han de participar voluntaria y sinceramente en la vida orgánica.

Tendrán como hábitos el aprecio a la organización, la participación voluntaria y sincera en la vida orgánica y el cumplimiento infalible de las tareas asignadas.

Detrás de los miembros de la ONC están los instructores y los maestros a cargo del aula y a su vez asesores del grupo de la ONC, que son los maestros más cercanos a los escolares y sus protectores políticos.

Hoy nuestro Partido deposita una gran confianza en estos.

Desea que sean auténticos maestros que aprecien y amen con cariño paternal a nuestros preciosos miembros de la ONC, y como raíces del árbol, hagan florecer su talento y los conduzcan por el camino correcto, tal como lo hicieron los instructores del Cuerpo infantil antijaponés.

En fiel acatamiento a la sublime voluntad de los Generalísimos Kim Il Sung y Kim Jong Il de amar a las generaciones venideras, nuestro Partido y el Gobierno de la República mantendrán como su deber más importante la labor para con nuestros queridos niños, y no escatimarán esfuerzos para prepararlos excelentemente como protagonistas de la Corea del Songun, como los más felices del mundo.

Queridos miembros de la Organización de Niños de todo el país:

Permítanme volver a felicitarles de todo corazón por la celebración de su Día, el 6 de junio, en medio del gran interés y la bendición de nuestro Partido y pueblo.

Una vez más saludo cordialmente a los maestros y padres que trabajan abnegadamente por todos los medios por el más luminoso porvenir de este poderoso país, la Patria socialista.

¡Qué tengan un brillante futuro las nuevas generaciones de la Corea de Kim Il Sung y Kim Jong Il!